La marca de Calth, edición de Laurie Goulding, 25ª novela de la saga La Herejía de Horus: Leido .
[Sinopsis en la web del Grupo Planeta]
La Herejía ha llegado a Calth sin avisar. En pocas horas de combate, los orgullosos guerreros de la XIII Legión, los Ultramarines de Guilliman, fueron aplastados por la traición de sus otrora hermanos de la XVII. Ahora, con el planeta a merced de las erupciones solares de la estrella herida de Veridian, los supervivientes deben enfrentarse a los Word Bearers restantes y a sus impíos aliados o a un destino fatal en los sombríos refugios arcológicos que hay bajo la superficie del planeta.Un nuevo recopilatorio de historias cortas, ambientadas en este caso en la batalla de Calth y mas concretamente en los preparativos previos y en las consecuencias de esta. Tanto en la guerra de túneles que se prolongó durante años bajo la superficie de Calth, como los horrores que durante ese periodo ocurrieron en esos túneles.
Los Ultramarines, como no podían ser de otro modo, son presentados como los héroes sacrificados. Valientes protectores del Imperio, excelentes tácticos, valientes... y todo eso que ya conocemos de uno de los capítulos mas aburridos de marines.
Mucho mas interesantes son las historias sobre los Word Bearers, o aquellas que implican a civiles y otros personajes no-marines.
En el caso de los Word Bearers, cuando no son vistos desde el punto de vista de los Ultramarines (maniacos descerebrados, origen de todo mal, etc...) son un grupo peculiar. Varias historias ahondan en su búsqueda del conocimiento, los Gal Vorbak, y la curiosa-interesada-peligrosa relación que mantienen con las criaturas del mas allá. Por desgracia, incluso cuando ellos mismos son los protagonistas, muchas historias caen en los clichés y los tropos habituales de los malos de opereta, perdiéndose gran parte del interés que podría tener leer historias de este capítulo.
La postura de los pobres civiles y como luchan contra algo que les supera en varios ordenes de magnitud es mucho mas interesante sin embargo. Aunque, de nuevo, solo vemos una parte del relato. Los seguidores de los Word Bearers son de nuevo fanáticos sin mente que se lanzan alegremente a la muerte... una forma simplista y poco aprovechada de narrar estos acontecimientos, y que contrasta con los puntos de vista tan interesantes que hemos encontrado en otras novelas. Donde los buenos no eran tan buenos, ni los malos eran tan malos... mas bien al contrario, los buenos eran habitualmente bastante cabrones, y los malos, como poco, presentaban puntos de vista realmente comprensibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario